El sabor del norte ahora en el sur

Bierzo

Al noroeste de las tierras íberas existen lugares mágicos donde las tradiciones más ancestrales han permanecido impasibles al paso del tiempo como parte de la propia naturaleza salvaje de la región. Lugares en los que las costumbres legadas durante siglos se transforman en el sabor más puro y en el aroma más vivo. En estas tierras místicas, el ayer sigue siendo hoy gracias a las pacientes y hábiles manos de grandes maestros artesanos que transforman la naturaleza más primaria en una auténtica experiencia para el paladar. Es de esta tierra de donde nacen productos tan extraordinarios como el chorizo del Bierzo o los ingredientes del tradicional Compango asturiano-cantábrico.

El chorizo del Bierzo, elaborado en la región leonesa del mismo nombre, es uno de los embutidos que mejor representa el sabor del norte de la península ibérica. Obtenido a partir de carnes magras y pancetas provenientes de ganado porcino, el chorizo del Bierzo se caracteriza principalmente por su tradicional proceso de elaboración en el que se diferencian dos momentos clave: el adobado y la curación.

Bierzo

En el primero,  se emplea un adobo tradicional preparado a partir ajo, pimentón y sal. Del tipo de pimienta utilizada dependerá el tipo de chorizo producido. Así, distinguimos el chorizo del Bierzo dulce y el picante.

Luego del proceso de adobado, el compuesto formado es amasado mediante una técnica artesanal y embutido en el interior de una tripa de cerdo totalmente natural. Tras esto, comienza su proceso de curación, en el que se produce un ligero ahumado a partir del humo producido por la combustión de
madera de roble o de encina antes de ser depositados en los secaderos.

De esta forma se obtiene este chorizo casero que deleitará el paladar del consumidor con el sabor de siglos y siglos de la tradición más pura. Un chorizo que por su gran sabor y envolvente aroma es cada vez más demandado en los fuegos de toda la hostelería española, no sólo en la del norte.

En cuanto al compango, se trata de un acompañamiento ahumado empleado típicamente en la preparación de la popular fabada asturiana, así como en los tradicionales cocidos lebaniegos y montañés. No es un producto en sí mismo, sino que está constituido por tres elementos típicos de la gastronomía del norte de la península: chorizo asturiano, chorizo de fuerte sabor y con gran proporción de pimentón, morcilla asturiana, también de sabor fuerte y con cebolla en su composición, y tocino entreverado, que posee una alta concentración de carne entre la grasa y con salazón.

La complejidad de estos platos obliga a los bares y restaurantes a disponer en sus cocinas de un gran número de productos frescos para su elaboración. Sin embargo, en Bedoya Hostelería disponemos de un compango envasado al vacío que permite disponer de estos productos en cualquier momento, sin que se produzca ningún detrimento de su calidad y propiedades organolépticas.

Como ocurre con el chorizo del Bierzo, este tipo de platos autóctonos de la cocina del norte de España se están extendiendo con fuerza hacia otras zonas de la geografía nacional, convirtiéndose en la atracción culinaria principal de un gran número de bares y restaurantes.

Conscientes de esta creciente demanda, desde Bedoya Hostelería te ofrecemos todo el sabor del norte a través de los productos de la mejor calidad, para que puedas hacer sentir a tus comensales siglos y siglos de sabor en sólo un bocado ¡Contacta con nosotros y descúbrelo!